Tras su abstención en el Senado al momento de votar la ley por la interrupción voluntaria del embarazo, el presidente del bloque Justicialista desembarcó en La Plata donde se llevó adelante el Encuentro para una Mejor Argentina. Allí, se lanzó a la carrera electoral de cara al 2019 desde Peronismo Federal.
“Tengo una decisión política”, dijo ante la prensa; y ratificó: “Me voy a someter a un escenario de una eventual compulsa; o a buscar los mecanismos de consenso con figuras que conforman este espacio político, que son una alternativa electoral muy fuerte”.
En el teatro Metro, Pichetto nombró a los dirigentes Sergio Massa y Roberto Lavagna; y a los gobernadores Juan Manuel Urtubey, de Salta, y Juan Schiaretti, de Córdoba, con los cuales apunta a definir las candidaturas. Eso sí, él ya está anotado.
En cuanto a las fronteras partidarios, sostuvo que “los compañeros del peronismo siempre son bienvenidos”, y auguró: “En 2019 va a haber tres estructuras peleando: Cambiemos -con Maurcio Macri-, Unidad Ciudadana -con Cristina Fernández- y Peronismo Federal, en un esquema donde va a haber ballotage. Difícilmente alguna de las fuerzas pueda ganar en la primera fuerza”.
En cuanto a la construcción del espacio, manifestó que “esta construcción es muy clara, y se diferencia de Unidad Ciudadana, que es un espacio de centro izquierda. Si el peronismo no se reconstruye, corremos el riesgo de diluirnos. En este momento es muy importante expresar las ideas”.
Por otro lado, Pichetto le dedicó unas palabras de afecto a Eduardo Duhalde, a quien” no se lo recuerda como corresponde. Reconstruyó la Argentina en el peor momento del país”; y detalló que “nuestra propuesta no tiene nada que ver con alianzas o inserción de sectores de la izquierda argentina, ligados al viejo PC, aliados de la dictadura militar, o sectores del troskismo que piensan que rompiendo todo existe la posibilidad de volver al poder”.
Finalmente, se refirió a las administraciones de CFK y de Mauricio Macri. Cuestionando la gestión de Cristina Fernández de Kirchner, agregó que “los últimos cuatro años de gestión de la expresidenta y del ministro (Axel) Kicillof fueron un fracaso”, porque “terminaron con un fuerte intervencionismo del Estado, un cepo a la economía, un montón de trabas que hacían imposible que la Argentina creciera”.
Sobre el actual gobierno, enumeró que “aumentó el endeudamiento externo, las paritarias siempre a la baja, pérdida de poder adquisitivo tremenda, devaluación del 40 por ciento con paritarias en el sector público del 15 y una profunda crisis ligada a la pérdida del consumo”.
“Nosotros no somos la avenida del medio. No somos una alternativa híbrida sin rumbo y sin corazón. Nosotros somos el futuro, el proyecto político nacional para recuperar la Argentina, salir de la lógica del ajuste, incrementar la demanda interna, el consumo y una política proactiva de creación de empleo”, afirmó Pichetto.
Desde la primera fila, observaban el discurso los legisladores massistas de la provincia de Buenos Aires Ricardo Lissalde y José Pallares; el diputado Diego Bossio, y los senadores de la Nación Carlos Caserio (Córdoba), Alfredo Luenzo (Chubut), Carlos Espínola (Corrientes). [El Teclado]