El concejal del GEN de La Plata, Gastón Crespo, le solicitó al Departamento Ejecutivo municipal que establezca una mesa de negociación con las empresas de telecomunicaciones que operan en la ciudad para trasladar las quejas de los usuarios y plantear las necesidades que deben cubrirse en la capital de una de las provincias más importantes del país.

Al respecto, el concejal explicó: “Con el avance de las nuevas tecnologías y su implementación en la mayoría de las actividades de producción, comerciales y hogareñas, el servicio estaría saturado o a punto de alcanzar su máximo nivel de prestación. Por eso, consideramos que el Municipio, como representante de las necesidades de los vecinos y en pos del mejor desarrollo de las actividades, debería encabezar un reclamo que finalice con las libertades de las empresas para funcionar según les conviene”.

En este sentido, agregó que “en la actualidad los servicios de telefonía, internet y televisión por cable están centralizados en un puñado de empresas que marcan
condiciones y reparten territorios entre ellas sin la menor participación o control del Estado”.

“Si consideramos que nuestra ciudad tiene una población que ronda los 800 mil habitantes, sumado a cientos de empresas y oficinas que hacen uso de nuevas
tecnologías, no podemos tener un servicio ineficiente y mucho menos al mismo costo que en ciudades más pequeñas. Una sola antena de telefonía abastece una mayor cantidad de aparatos que en un pueblo pequeño y por el mismo costo al usuario”, puntualizó Crespo.

“En tiempos de pandemia la conectividad se ha vuelto un bien esencial y un derecho para todos los vecinos, destacando que los alumnos y docentes de todos los niveles educativos pudieron continuar sus actividades gracias a estas herramientas. La UNLP fue una de las primeras universidades del país que garantizó la continuidad del año académico de forma virtual”.

Para finalizar, el referente del GEN sostuvo “necesitamos que el Estado adopte una visión del siglo XXI y entienda que la gestión de la ciudad debe abarcar todas las áreas en las que los vecinos reciben un servicio. La mejora de cada uno de ellos repercute directamente en el bienestar común, en el desarrollo de una industria eficiente y saludable, además de fomentar emprendimientos que desembocan en un retorno económico para las propias arcas municipales”.