El presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció implementar un pasaporte sanitario que permita a las personas ya vacunadas y/o recuperadas recientemente del virus ingresar a espacios cerrados. En la provincia de Buenos Aires, ya existe un municipio pionero que implementó estas medidas hace ya casi un mes. 

Se trata del distrito de Chacabuco, un distrito con aproximadamente 55 mil habitantes, 4.802 de esos ciudadanos vacunados con dos dosis, 14.464 con una dosis y 3.750 que padecieron COVID-19 en los últimos tres meses, y que el pasado 18 de junio implementó programa piloto denominado “Cuidar fuentes de trabajo, protocolo solidario COVID-19”, del que se desprende el pasaporte solidario "se busca ayudar a bares, restaurantes y gimnasios que estaban cerrados".

En diálogo con El Teclado, el secretario de Gobierno de Chacabuco, Alejo Pérez, explicó que la medida fue una propuesta del intendente Víctor Aiola, luego de varias reuniones con los sectores más afectados por la pandemia.

“Lo que ellos nos pedían eran tener cierta previsibilidad y un horizonte de trabajo, porque son comercios que tienen que mantener costos fijos, empleados, proveedores”, y agregó que a medida que fueron los casos y avanzando la vacunación, “los estudios consideraban que era seguro y que tenía bajo riesgo poder implementar este pasaporte”.

En el documento oficial se explica  que “formulamos una propuesta con el objetivo de acompañar y cuidar a estos sectores de la economía. Una alternativa viable sería permitir la concurrencia de clientes, bajo estricto protocolo, a los lugares que brindan servicio de gastronomía y a los gimnasios, con la condición de que quienes concurran tengan aplicadas dos dosis de vacunas o hayan tenido COVID-19 en los últimos tres meses. Está demostrado científicamente que en ambos grupos la posibilidad de reinfección, de contraer enfermedad grave y la mortalidad son extremadamente bajas”.

Según informó Pérez, el pasaporte funciona presentando el certificado de vacunación que emite la provincia, o con el certificado de alta de la secretaría de salud emitido por el SISA. 

BALANCE

El pasaporte ya tiene un mes funcionando en el distrito, lo que incentivó también a que más personas, sobre todo las y los jóvenes, a inscribirse al Plan de Vacunación. 

“El resultado en términos generales fue bueno. No tuvo impacto en términos sanitarios: no hubo contagios, ni rebrotes por permitir estas actividades por el pasaporte. Por otro lado, comercialmente, si bien no es la solución definitiva porque se siguen cumpliendo con las medidas sanitarias”, explicó Pérez. 

FASE 3

Durante la jornada de ayer, la Provincia confirmó el pase de fase del distrito de la 2 a la 3, lo que implica la apertura de actividades, la ampliación del porcentaje de aforos en espacios cerrados y el regreso de las clases presenciales. [El Teclado]