Aquel 19 de septiembre de 2006, según palabras de su hijo, el albañil Jorge Julio López estaba "muy nervioso". Quería verle la cara a su torturador, Miguel Etchecolatz, que hasta el momento no había presenciado ninguna de las audiencias del juicio que lo llevó a la cárcel por delitos de lesa humanidad.
"Esa era la oportundiad de mi viejo de decirle en la cara que había sido torturado por él, que había sido uno de los genocidas que había matado a sus compañeros de lucha. En un momento dijo 'tuve ganas yo de matarlo', pero después dijo 'esa basura humana no se lo merece'", rememora Rubén López, a 11 años de la segunda desaparición de su padre.
Este lunes en La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires, se realizaron dos marchas (una a las 16, convocada por la Mesa de Derechos Humanos boanerense; y otra a las 18, organizada por la Multisectoral La Plata, Berisso y Ensenada). Allí, el hijo del dos veces desaparecido Julio López compartió sus sensaciones.
Según comentó, su familia nunca sintió miedo de que le pasara lo que finalmente ocurrió. "Teníamos miedo de que le pasara algo físico, que sufriera algún tipo de emoción que no le permitiera continuar con el juicio. Nunca pensamos que le pasaría lo que pasó, inclusive nosotros mucho tiempo mantuvimos la opinión de que era físico lo que le había pasado, mental, cagazo como se dice en el barrio. Pero no. Y nunca supimos, tampoco, quién o quiénes fueron los que idearon esta desaparición, pero la lograron".
"Yo lo quiero encontrar, no importa cómo sea. Si tengo que comenzar el duelo, empezarlo; hace 11 años que no tenemos el primer año, como le dicen los profesionales al duelo. Si lo encontramos con vida bienvenido sea, pero no me importa: quiero encontrarlo", puntualizó.
Y advirtió que "con lo que está pasando con Santiago Maldonado es como que removimos todo otra vez lo mismo que nos pasó a nosotros hace 11 años". Además, López se refirió a todos aquellos que, indignados por la búsqueda del joven artesano, pregutaban por su papá: "Los que nunca acompañaron nada, los que chicanearon con esa fracesita no van a estar nunca. Ojalá vengan y me digan 'yo critiqué y hoy estoy acá por Santiago y por tu viejo'. Ojalá. Pero aquellos que nunca hicieron nada, no van a estar hoy presentes. Acá no importa la cantidad, importa la calidad de la gente que está marchando en cualquiera de los actos. Desde el sur, Sergio Maldonado acaba de mandarme un flyer donde dice que él va a estar participando en Trelew pidiendo por mi viejo. Pedir hoy por Santiago es lo menos que puedo hacer". [El Teclado]