Al término del acto que la UCR bonaerense llevó a cabo en el estadio de Ferro, El Teclado habló mano a mano con el senador y candidato a renovar, Alejandro Cellillo, que todavía emocionado por lo vivido, dejó en claro para qué está el radicalismo de la provincia de Buenos Aires. El ex intendente de General Alvear se entusiasma de cara a lo que viene.

-¿Qué análisis hace de este acto del partido que acaba de concluir?
-Está todo a la vista, había que vivirlo. Describirlo en palabras es un poquito más difícil. Siento una profunda emoción de ver al partido renovado, otra vez con un gran poder de movilización, con ganas de ser protagonista de una coalición de gobierno. Es muy lindo ver y sentir todo esto, es por lo que hemos luchado y soñado tanto tiempo. Además, para sumar, estuve acá en el acto de Raúl (Alfonsín) en 1983. Es una emoción extra.

-¿El mensaje es también para adentro, avisando que se van a disputar lugares?
-No sé si pasa por la disputa de lugares; sino por las políticas que la coalición va a llevar adelante en caso de tener la oportunidad de volver a gobernar; hacerlo desde un partido que tiene su identidad, su conducta, su historia. Y en función de eso defender esas ideas dentro del espacio de Juntos, el cual por supuesto no aspiramos a romper. Tenemos muchas coincidencias pero hay que discutir algunas cosas, las cuales creemos que hay que cambiar.

-¿Cuáles serían esas cosas que hay que cambiar?
-Hay que estar más cerca de la gente fundamentalmente, del ciudadano de a pie, del trabajador, de las pymes. Hay que defender a la educación no solo en cuanto a la excelencia educativa, sino también en la oportunidad. Y muchas otras cosas que históricamente hemos defendido y que incluso en el contexto de la pandemia expresamos de manera contundente, dejando en claro que se estaba haciendo un daño extra, más allá de la cuarentena; como por ejemplo la no concurrencia a clases de los chicos.

-¿Yendo hacia atrás, se sentían realmente parte del gobierno de María Eugenia Vidal y/o del de Mauricio Macri? ¿También sería ese uno de los cambios a proponer?
-La relación de fuerzas que hoy tenemos nos permite expresarnos de otra manera e internamente discutir esos cambios en el rumbo, que en algunos casos son matices y en algunos casos son muy importantes para la gente. Por nuestra historia, por la experiencia, por conocer esta Provincia de tantos escenarios disimiles y complejos es que queremos ser parte de la discusión en la mesa y parte de los que trabajan para solucionar los problemas.

-Se habló mucho en el acto de 2023... ¿Están decididos a ir por la gobernación?
-Nosotros aspiramos mínimamente a tener candidatos propios para gobernador y presidente. El radicalismo bonaerense ha recuperado volumen, músculo, poder de movilización y voto. Queremos ser parte de las soluciones. Ese es uno solo de los desafíos que tenemos de cara al 2023. Después de las elecciones de noviembre toda la clase política tiene que poner de alguna manera las barbas en remojo para aportarles soluciones a la gente que está muy apremiada, fundamentalmente por lo económico.

-El gobierno hizo un llamado al diálogo para después de las elecciones...
-Eso hoy pareciera que es simplemente una estrategia para recuperar votos. Nunca trabajó en una sintonía de diálogo y de acordar políticas.

-¿Lo ve debilitado al gobierno después de las PASO? Monzó (Emilio) dijo que estas elecciones podrían significar el fin del kirchnerismo...
-Me atrevo a pensar lo mismo. Evidentemente el gobierno está debilitado, tanto en Nación como en Provincia están desorientados, sin rumbo. Hoy por hoy, la llegada de los intendentes del Conurbano le maquilla la imagen al gobernador pero las soluciones reales no llegan. De todos modos estamos dispuestos a dialogar. Las cámaras funcionan con acuerdos, con diálogo; y así debiera haber sido siempre.

-Se viene el presupuesto y hay jueces por designar...
-Sí, están pendientes. Eso marca la poca voluntad de diálogo que tiene el oficialismo en sus diferentes niveles. Con respecto al presupuesto vamos a analizar que los números estén destinados a las áreas que entendemos importantes, trascendentes, y ahí tendrán un franco apoyo. Por más que el gobernador gaste su tiempo diciendo que le hemos puesto palos en la rueda, le hemos votado absolutamente todas las propuestas, con alguna modificación en el inmobiliario o el inmobiliario rural. Tampoco hemos dejado de votarle rápidamente las emergencias solicitadas. No sucedió lo mismo con las cámaras. El Ejecutivo no nos prestó la misma atención. [El Teclado]