Adiós al control de temperatura y a los rociadores en los espacios cerrados
Los casos de coronavirus se mantienen controlados en el país, y ante este panorama, el ministerio de Salud de la Nación recomendó actualizar los protocolos sanitarios.
En primer lugar, ya no será necesario sostener el control de temperatura corporal, el rociado de manos con alcohol en los accesos a edificios, los turnos programados, las sanitizaciones y otras medidas adicionales, a menos que se entiendan fundamentales para el desarrollo de la actividad.
Pero, lo que sí debe mantenerse es la utilización de tapabocas en espacios compartidos cerrados y abiertos (solo no es obligatorio su uso cuando se circula al aire libre a más de dos metros de distancia de otras personas), mantener la distancia mínima de dos metros entre personas, asegurar una adecuada ventilación cruzada y continua en los ambientes, así como continuar con el lavado frecuente de manos.
Finalmente, las instituciones y demás organismos podrán establecer las medidas que entiendan pertinentes y necesarias para el desarrollo de cada actividad en particular y tendrán la posibilidad de instrumentar medidas sanitarias adicionales según la actividad.
La medida tomada tiene que ver con las coberturas de vacunación contra la COVID-19 –con el 58,9% de la población con esquema completo y el 91,5% de los y las mayores de 18 años con esquema iniciado–, de la estabilidad de los casos en un número bajo y la disminución de las hospitalizaciones y las muertes por más de 23 semanas consecutivas. [El Teclado]