Por Magdalena López Pacheco

El Frente de Izquierda-Unidad de los Trabajadores (FIT), mejoró los resultados en estas elecciones generales y consiguió dos bancas en la Cámara de Diputados, por la tercera sección electoral. Con el 7, 71% de los votos, fueron electos los diputados Guillermo Kane y Graciela Calderón, quienes asumirán sus bancas en diciembre. 

En una entrevista con El Teclado, el diputado electo, Guillermo Kane, analizó los resultados, el avance de la ultraderecha y la gestión del gobernador Axel Kicillof. Y aseguró que se viene un proceso de mucha movilización en las calles. 

- ¿Cómo analiza estas elecciones y los resultados que se dieron?

En la provincia de Buenos Aires perdieron votos el Frente de Todos y Juntos por el Cambio, y vemos que hay una creciente sensación de rechazo de una parte de la población con quienes vienen gobernado el país. Y las razones están muy claras: el nivel de endeudamiento, de pobreza, de inflación, de devaluación, son una tendencia que no pueden adscribirse a un gobierno o al otro.

En este sentido, la votación de la izquierda tiene esa comprensión. Necesitamos una fuerza política nueva. Así también se presentó una ultraderecha, pero que responde a una interna en el PRO y levanta un programa en defensa de los grandes empresarios.

- ¿Cómo analizan el avance de la ultraderecha?

Es una apuesta fuerte de empresarios y grupos mediáticos para que la bronca contra los que vienen gobernando se canalice y sea beneficiosa para el sistema. Lo más importante que nos mostró la campaña es que están jugando a una interna en el propio macrismo, contra Larreta. 

- ¿Qué proyectos vas a llevar a la Legislatura?

Hemos entrado dos diputados por la tercera sección, volvemos con una banca reforzada y sobre todo de un crecimiento muy fuerte en los barrios entre los trabajadores desocupados, el pueblo obrero ha sido la vanguardia de esta campaña.

Nosotros vamos a seguir siendo la voz de la oposición al consenso de ajuste que hay en las bancadas de Kicillof y de Vidal. Vamos a volver con una carga muy fuerte de movilización contra los problemas que hay instalados en los barrios populares que han llevado ese rechazo al peronismo.

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Vamos a volver con muchos planteos que hicimos en su momento, como la relocalización de Villa Infamable en Avellaneda, vamos a insistir con el proyecto para que se haga efectiva la Educación Sexual Integral, el pase a planta de los trabajadores estatales.

- El presidente anunció una convocatoria a la oposición para discutir un acuerdo/agenda política, ¿aceptarían?

Concretamente lo que vemos es que está tratando de tejer algún acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que por la propia debilidad del Gobierno tenga un apoyo de la oposición. Nosotros no solo vamos a votar en contra del Fondo, sino que vamos a hacer una campaña muy profunda. 

- ¿Qué balance hace de la gestión del gobernador Axel Kicillof?

Se ha desenmascarado un relato que lo presentaba a Axel Kicillof como un izquierdista o un progresista, y su gestión ha sido de las más conservadoras y retrógradas para el pueblo trabajador, poniendo a un represor como Berni, respondiendo a la política de vivienda con represión como pasó en Guernica, completamente temeroso en tomar medidas durante la pandemia para no afectar los negocios de la salud privada.

Tenemos un balance muy negativo, como también lo tiene la población, por eso tuvo una caída tan fuerte en votos. La novedad es que con la presencia de Insaurralde y Nardini en el gabinete, lo que se va a ir profundizando es que Kicillof ha quedado como un rehén en manos de la vieja estructura del PJ, que no lo mantiene a él y que más bien lo está socavando.

Vemos un gobierno provincial que está también en una crisis interna muy fuerte, y que lo que se vino a presentar como renovación ha quedado en manos del PJ. [El Teclado]