Los intendentes de la provincia de Buenos Aires están tomando suspendiendo las fiestas en sus municipios como una forma de prevenir el desborde del sistema sanitario ante el avance del coronavirus. 

Ahora, fue el jefe comunal de Lincoln, Salvador Serenal, quien tuvo que dar la mala noticia. "Es muy riesgoso. Tenemos a nivel mundial la variante Omicron, que si bien tiene un porcentaje bajo de agresividad, es un contagio masivo, donde tenemos que seguir cuidándonos, porque en las últimas semanas se duplicó la internación en terapia intensiva", aseguró a Somos Lincoln.

En esta línea, el intendente radical llamó a "insistir con la vacunación, pensando ya en la cuarta dosis". "La pandemia no terminó", agregó.

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Desde diferentes municipios están tomando medidas similares, y pese al impacto que esto tiene en el interior bonaerense donde estas fiestas son fundamentales para que los pueblos sean reconocidos como lugares turísticos. 

Por lo pronto, de cara al 2023, Serenal adelantó que "tenemos un lindo proyecto para el 2023, pensando que con el sistema de vacunación vamos a llevar adelante el carnaval para el 2023. Y trabajaremos todo el año para tener el Carnaval que nos merecemos". [El Teclado]