Oriundo de Saladillo, fue tal la pasión por el vuelo que inclusive su premonitorio apodo se relaciona a un ave. El mundo de la ingeniería aeronáutica se tiño de luto este miércoles. Murió Augusto "Pirincho" Cicaré.
Autodidacta y un verdadero genio de la aviación, tenía 84 años y se encontraba internado en el Hospital Posadas de Saladillo desde hacía algún tiempo. A pesar de su fama internacional, nunca dejó su pago chico. Por eso, la ciudad que hoy encabeza José Luis Salomón -en uso de licencia- lo despidió como "el Ciudadano Ilustre, que a través de su genialidad nos hizo volar a todos los saladillenses".
Tras darse a conocer la noticia, los mensajes de pesar inundaron las redes remarcando no solo su profesionalismo, sino el tipo de persona que era, y que indudablemente dejó una huella por donde pasó.
El gobernador Axel Kicillof publicó: "Lamento mucho el fallecimiento de Augusto Cicaré. Un gran orgullo de nuestra Provincia. Con su capacidad e inventiva revolucionó la industria aeronáutica nacional".
Por su parte el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni -si sabrá de helicópteros- lo despidió "con gran pesar", y agregó que lo recordará "como el hombre que fue leyenda de la Aeronáutica. Autodidacta, inventor y fabricante de helicópteros; dedicó su vida a construir pensando siempre en el bien común".
Desde su tierra, Salomón lo despidió con sentidas palabras: "'Tu vuelo más soñado, Pirincho. Disfrutá intensamente éste vuelo mágico de retorno a casa, sabiendo que diste mucho y bueno. Saladillo te quiere y ahora eternamente".
Ricardo Lissalde, presidente de AUBASA y saladillense, escribió: "Querido Pirincho. Te fuiste, que triste noticia. Hoy Saladillo despide a un ciudadano ilustre, ejemplar, genio, humilde, el más grande de nuestra historia".
Más temprano, el expresidente Mauricio Macri lo despidió en sus redes oficiales calificándolo también de "un genio aeronáutico y un verdadero espíritu emprendedor y creador. Tuve la suerte de conocerlo y escuchar su pasión en la fábrica de Saladillo".