“Somos la generación del cambio. Somos la generación que vino a hacer una provincia mejor”. Primero lo dijo Esteban Bullrich, ahora senador nacional electo de la provincia de Buenos Aires por Cambiemos. Allí, ante una militancia eufórica, el ex ministro de Educación felicitó a Gladys González por convertirse en su par legislativa.

Lo que siguió fue de manual Pro: “Lo que nos une es mucho más fuerte que lo que nos divide. Sigamos aspirando a una provincia y un país donde el que piensa diferente no sea un adversario sino una visión a la cual tomar en cuenta. Cada uno de nosotros escucho el mensaje. Vamos a construir puentes en el Senado, y también en la provincia para transitarla mejor (N.deR.:cuac)”.

Luego vino la palabra de la gobernadora María Eugenia Vidal, que fue quien se puso la campaña al hombro y habló en el escenario como si el triunfo fuese suyo. En los hechos, lo fue.

“Para los que no nos votaron, su voz cuenta. Y los vamos a escuchar. Somos la generación que va a cambiar para siempre la provincia. Esta noche volvieron a decir ‘no aflojes’. Y no vamos a aflojar. Solo te pido que estés ahí formando parte del equipo de los imparables”, dijo la mandamás bonaerense.

Finalmente un rato después habló el presidente: “Es un largo camino en donde nadie nos va a regalar nada. Aspiramos a más, a vivir mejor. Hoy ganó la certeza de que podemos cambiar la historia para siempre”.

“Somos la generación que vino a cambiar la historia”, repitió otra vez Mauricio Macri. Así, dio por finalizado el examen que rindieron ante el maestro Jaime Durán Barba, artífice del nuevo concepto de “generación” que salió de las sombras para acompañar a sus candidatos. [El Teclado]