El fiscal Diego Luciani solicitó este lunes la pena de 12 años de prisión e inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, en el marco de la causa por el supuesto direccionamiento de la obra pública vial en Santa Cruz entre 2003 y 2015.
En este marco, la dirigenta adelantó esta noche que "si algo faltaba para confirmar que no estoy ante un tribunal de la Constitución, sino ante un pelotón de fusilamiento mediático-judicial, es impedirme el ejercicio del derecho de defensa ante cuestiones que nunca figuraron en el acto de acusación del fiscal al que asistí durante 5 días en mayo de 2019".
Si algo faltaba para confirmar que no estoy ante un tribunal de la Constitución, sino ante un pelotón de fusilamiento mediático-judicial, es impedirme el ejercicio del derecho de defensa ante cuestiones…
Por ello, la vicepresidenta decidió quemañana a las 11:00, a través de sus redes "voy demostrar, justamente, por qué me están prohibiendo hablar en el juicio después del obsceno guión que montaron los fiscales".
Mientras tanto, militantes a favor y en contra se agolparon en las puertas de su casa del barrio de Recoleta y comenzaron a producirse hechos de violencia detenidos por el avance policial, con gases lacrimógenos.
Los hechos fueron repudiados por Cristina Fernández de Kichner: "Lo único que le faltaba a Rodríguez Larreta para ser Macri: la policía de la ciudad reprimió con palos, gas pimienta y gases lacrimógenos a ciudadanos y ciudadanas que se acercaron a Juncal y Uruguay como muestra de apoyo frente a los insultos de un grupo de energúmenos macristas", escribió en sus redes.
Lo único que le faltaba a Rodríguez Larreta para ser Macri: la policía de la ciudad reprimió con palos, gas pimienta y gases lacrimógenos a ciudadanos y ciudadanas que se acercaron a Juncal y Uruguay como muestra de apoyo frente a los insultos de un grupo de energúmenos macristas
Y agregó: "Jamás, ningún militante ni simpatizante de nuestro espacio político ha ido al domicilio de ningún dirigente macrista a insultarlos. Ni a la casa de Macri, ni a la de Rodríguez Larreta, ni a la de Bullrich o Vidal".
"Son muy, pero muy violentos… y cuando son menos, la policía de Rodríguez Larreta se suma a la agresión contra mi persona. Nunca fueron ni serán democráticos", cerró.
Así las cosas, se espera la palabra de la vicepresidenta mañana en las redes, donde aportará pruebas al público en general. [El Teclado]