Hace unos días, tras las declaraciones del Presidente Mauricio Macri en las que aseguró que no podía ser que "que durante 45 días esté interrumpido el servicio de Justicia”, el diputado provincial Guillermo Castello reimpulsó un proyecto presentado en febrero que busca terminar la feria.
Desde el gremio de judiciales AJB mostraron su rechazo a la posible reforma y por eso irán al paro y se movilizarán por las calles de La Plata el miércoles. En tanto, el otro reclamo central que harán los judiciales es el de la devolución de los descuentos por los días de paro en agosto que en algunos casos alcanzaron hasta el 17% del salario.
En esta jornada los judiciales de todo el país “realizarán acciones gremiales en rechazo a los proyectos de reforma que impliquen eliminación de las ferias judiciales, ampliación de la jornada laboral o restricciones en el plazo de vacaciones y en el régimen de licencias”, se indicó.
Los judiciales bonaerenses llevarán a cabo una concentración, a partir de las 11, frente a la sede central de la Suprema Corte de Justicia bonaerense, ubicada en avenida 13 entre las calles 47 y 48, de La Plata, donde además exigirán la devolución de los descuentos por paros aplicados este año.
En el comunicado el gremio expresó su “enérgico repudio a las declaraciones realizadas recientemente por el Presidente (Mauricio Macri), quien desarrolló una ingeniería comunicacional para convencer al conjunto de la sociedad que el principal obstáculo para que la Argentina avance es el alto costo laboral”.
“Para ejemplificar los privilegios de los que gozarían ciertos sectores de trabajadores y trabajadoras, eligió a quienes trabajamos en el Poder Judicial”, afirmaron.
Asimismo, denunciaron que “apelando deliberadamente a datos falsos o tergiversados sobre supuestas condiciones de privilegio en materia de ingresos, vacaciones o licencias, Macri pretende legitimar la necesidad de la más profunda y regresiva reforma laboral llevada a cabo desde la última dictadura militar”.
Finalmente, señalaron que “curiosamente, nada habló el Presidente de las verdaderas causas de las crisis de la Justicia: la dependencia de gran parte de los jueces, fiscales y defensores respecto del poder político al que deben controlar e investigar; o las históricas restricciones presupuestarias, que condenan al colapso permanente a un Poder Judicial que apenas se mantiene a flote gracias al esfuerzo de sus trabajadores y trabajadoras”. [El Teclado]