El 28 de diciembre se cumplirán 90 años del nacimiento del escritor Manuel Puig, el famoso escritor autor de "Boquitas pintadas" y "El beso de la mujer araña", entre otros libros. Un proyecto en el Concejo Deliberante propone señalizar con una placa la tumba del escritor fallecido en 1990 y cuyos restos descansan en el Cementerio de La Plata.

La iniciativa fue presentada por la concejala del Frente de Todos, Ana Negrete, quien resaltó relató que aparece la ciudad de La Plata en las obras de Puig y agregó: “Habla de la Universidad, de los árboles de nuestra ciudad, habla de esos lugares que como platense transitamos y nos hacen sentir orgullosos…”

En diálogo con Radio Provincia, la edil destacó que la iniciativa tiene que ver con “cómo honramos a nuestros muertos. Manuel Puig no solo fue un escritor. También fue un activista. Fue parte de la primera organización que defendió los derechos de la comunidad LGBT. Por lo tanto los platenses debemos poder pensar esto, pero desde ver la historia viva, que es compleja. Y por eso calificó como “un inicio” el hecho de señalizar el lugar donde descansan sus restos.

Manuel Puig, nació el 28 de diciembre de 1932 en General Villegas y falleció en Cuernavaca, México, en 1990. Sus restos fueron restituidos a pedido de sus familiares, y hoy descansa junto a su madre María Elena (Malena) Delledonne de Puig (ella era platense), en el Cementerio de La Plata. 

Este año se cumple 90 años del nacimiento de uno de los escritores argentinos más reconocidos del país y del mundo, y uno de los más experimentales de su generación: el folletín, fragmentos de boleros, tangos, cartas, películas, el pop art, la sexualidad, la homosexualidad, la censura, las dictaduras, la búsqueda de la libertad, la política, fueron ejes fundamentales para sus novelas. 

Además de ser escritor, fue uno de los fundadores del Frente de Liberación Homosexual, movimiento que continuó el legado del Grupo Nuestro Mundo en la lucha por conseguir cambios en la sociedad de aquel entonces, integrada por Juan José Sebreli, Néstor Perlongher y Blas Matamoro.

Puig dejó una enorme obra, entre las que encontramos su primera novela “La traición de Rita Hayworth” (1968), que contó con la autorización de la propia actriz para utilizar su nombre en el título. Su segunda novela “Boquitas pintadas” (1969), allí Puig se convirtió en el escritor más leído y a la vez reconocido por la crítica y la academia. Le siguió “The Buenos Aires Affair” (1973) que fue censurada por el gobierno militar, razón por la cual el autor decide exiliarse primeramente en Brasil y luego en México.

Durante el exilio escribe “El beso de la mujer araña” (1976), “Maldición eterna a quien lea estas páginas” (1980), “Sangre de amor correspondido” (1982), “Cae la noche tropical” (1988), entre las más conocidas.  Varias de sus novelas fueron llevadas al cine y al teatro, como el Beso de la Mujer Araña y Pubis Angelical (1979). 

LA PLATA, EN PUIG

La Plata está presente en las novelas de Puig, debido a su madre, platense, recibida de bioquímica en la Universidad Nacional de La Plata, en 1927. Y parte de la esencia e identidad de la ciudad es llevada en su escritura. Es el caso de su primera novela, La traición de Rita Hayworth, que abre su primer capítulo titulado: “En casa de los padres de Mita, La Plata 1933”. En donde se destacan las Facultades de la UNLP, el Teatro de la Municipalidad, el cine Select: 

(...) un día van a terminar de enterrar las casas los remolinos de polvo, hasta que paren de soplar los ventarrones de oeste a este. Toda la pampa recorren pero no llegan a La Plata, apenas una brisita y si las chicas respiran a pulmón abierto en la cuadra de la Facultad, se marean con el perfume de todas esas plantas, una cuadra antes de llegar ya empiezan las plantas de naranjas en las veredas de 48 desde calle 5 hasta 7 y frente al aula magna la plazoleta está cargada de florcitas de azahar en octubre, y la cabeza habría que tener despejada y libre como como un papel en blanco cuando se acercan los exámenes, sin respirar ese aire endulzado que sueltan las plantas pero dan ganas de cerrar los ojos y abrirlos y estar recorriendo un bosque, en una carroza, los bosques de Viena, cuando empiezan a despertarse los pájaros de la mañana y se levanta el sol detrás de la enramada que deja pasar pocos rayos, por tantos árboles que no dejan paso hasta que una brisa los mueve y tapan de aquí pero destapan de allá y van entrando los rayos de luz amarilla clara casi blanca por entre las ramas de hojas verde oscuro, que de noche son negras y verde claro a la mañana bien temprano”. 

Tendrá presente nuevamente a La Plata en su novela “The Buenos Aires Affaire”: “Los titulares y partes de textos que el oficial leyó sin prestarle atención fueron los siguientes (…) 5) ESTUDIANTES DE LA PLATA GANÓ POR 3-1 – Se jugó anoche en la capital de la provincia el segundo partido semifinal por la Copa Libertadores de América entre los equipos de Estudiantes de La Plata y la Universidad Católica de Santiago de…”. 

En una carta, publicada luego en los libros, “Querida familia: Tomo 1. Cartas europeas (1956-1962)”, el 29 de diciembre de 1958, escribía desde Londres: “Me acuerdo patente de cuando nos sentábamos con Bruno en un banco de la Plaza Italia, a la tardecita, después de la Pitman, creo. Mejor no acordarme de La Plata porque son tantos los recuerdos, las idas con la abuelita al cine Princesa y tantas cosas que mejor cambiar de tema”. 

Asimismo, la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata, cuenta con el Archivo Puig que comprende más de 20.000 documentos reunidos por el escritor, que han sido digitalizados por Mara Puig (sobrina de Manuel) y Pedro Gergho. Además de conservar los primeros apuntes que dieron origen a sus ocho novelas, pueden hallarse proyectos inconclusos o guiones cinematográficos inéditos”.

“Su organización, clasificación y comentario estuvo a cargo de la Dra. Graciela Goldchluk, coordinadora del Área de Investigación en Crítica Genética y Archivos de Escritores (CriGAE), del Centro de Investigación en Teoría y Crítica Literarias (CTCL), perteneciente al IdIHCS, UNLP-CONICET”. 

El proyecto fue tratado en la comisión de Planeamiento, que obtuvo consenso y fue despachado para su próximo tratamiento en el recinto. [El Teclado]