El equipo técnico de Edesur detectó 34 conexiones clandestinas en el barrio La Dolfina Polo Ranch, ubicado en el partido de Cañuelas, provincia de Buenos Aires.
Personal de la compañía confirmó que varias unidades no contaban con medidor y utilizaban estas conexiones clandestinas para abastecer de energía casas, predios con bombas de riego, iluminación de servicios generales, canchas de polo y 15 caballerizas.
Según indicaron mediante un comunicado, el operativo fue registrado en acta por un escribano público. Una vez finalizada la configuración de los casos y los cálculos del perjuicio provocado a Edesur, se tramitará la denuncia penal correspondiente por el delito de hurto de energía.
"Este tipo de conexiones son un gran problema para la red de distribución, debido a que provoca fallas en el sistema y afecta a los clientes que pagan por su consumo", aseguraron.
Y agregaron: "Además, implica un enorme riesgo para quien realiza la conexión ilegal que puede sufrir daños para sí, para terceros y generar daños en la vivienda de sus vecinos, al generar altibajos en la tensión".