En una actividad solidaria, personas privadas de la libertad de una cárcel bonaerense de La Plata construyeron y donaron 40 cuchas a un refugio de mascotas de la localidad de Moreno.
En el marco del programa “Más Trabajo, Menos Reincidencia” del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, internos de la Unidad 18 Gorina del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) construyeron, pintaron y decoraron 40 casitas para los perros de la organización “Mi Fiel Amigo”.
En una tarea coordinada por la Oficina de Capacitación y Oficios, a cargo de Daiana Coronel, en los talleres del establecimiento carcelario, 19 hombres de los pabellones 6 y 7, que se capacitan y trabajan en carpintería, cortaron, lijaron, encolaron y clavaron las maderas que se consiguieron gracias a la contribución de familiares y agentes penitenciarios, y confeccionaron los albergues que se utilizarán en el predio que aloja a 72 perros.
Ezequiel, uno de los privados de la libertad que trabajó en las cuchas, expresó: “La verdad, es que no tenía mucha idea de carpintería, pero me fui metiendo y fui aprendiendo. Estamos chochísimos, porque hicimos un bien. Gracias a nosotros, los animales estarán mejor”.
“Mi Fiel Amigo” es una organización sin fines de lucro dedicada al rescate recuperación y adopción de animales en estado de abandono. En este momento, no solo asisten a perros, sino que, también, lo hacen con caballos, cabras, gallinas y patos, entre otras mascotas.
La entrega de las cuchas, que fue articulada por la penitenciaria Micaela Simoni conjuntamente con la jefa de Inclusión Laboral, Mariela Moya, se realizó en la Unidad 18 y allí estuvieron los cuatro rescatistas que están al frente del refugio: Yanina Dalinger, Federico Pedernera, Belén Pedernera y Luciano Dalinger.
En nombre de la organización y a modo de agradecimiento, los representantes de “Mi fiel amigo” extendieron certificados al personal del SPB y a los internos que participaron de la experiencia solidaria.
Por su parte, Federico contó que era la primera vez que recibían una donación desde una cárcel y expresó: “Todo lo que llega siempre es recibido con los brazos abiertos, porque todo suma, salga de donde salga”. Respecto a las cuchas, el proteccionista recalcó: “Están hermosas y, realmente, se ve el trabajo y la dedicación que les pusieron”.
Cabe mencionar que el director de la Unidad 18 Gorina, Diego Pedrazza, el subdirector de Asistencia y Tratamiento, Walter González, el subdirector de Administración, Gustavo Moriondo, y el jefe de Penal, José Villarroel, acompañaron el proceso y estuvieron presentes durante la entrega.