Cada año que pasa tenemos más desafíos y nuestro trabajo se complejiza, pero hoy pienso en no quedarnos en esa reflexión porque es nuestra realidad, y ya estamos acostumbrados a que así sea y nos vamos adaptando y poniendo todo nuestro esfuerzo para seguir haciendo de la Caja y los Colegios, instituciones que perduren en el tiempo y acompañen a los y las profesionales. 

Creo que este año 2023, nuestra profesión, tiene que estar enmarcada fundamentalmente en los 40 años de Democracia. Porque que hoy , podamos debatir libremente las problemáticas de nuestra profesión, podamos defender los derechos de la sociedad, es producto, primero de la valentía de aquellos que lucharon y en algunos casos se quedaron en esa lucha para lograr la restauración del Estado de Derecho, pero también del compromiso, de nuestra abogacía y la convicción de una sociedad que rechazó y rechaza gobiernos que provengan de expresiones autoritarias y violentas. 

Y cuando hablo de los que lucharon, nosotros los abogados, tenemos nuestro propio capítulo trágico y hoy quiero hacerles un humilde homenaje recordándolos. 

El pasado 6 de julio, el día que se conmemora como La Noche de las Corbatas, instituido como el día del abogado laboralista y de los abogados víctimas del terrorismo de estado, trágica noche donde fueron desaparecidos once colegas por defender los derechos de los trabajadores en la ciudad de Mar del Plata.

Recordado esto y hecho este pequeño homenaje no solo a estos once colegas sino a todos los que a lo largo de estos 40 años dejaron la vida en defensa de las instituciones y los derechos de la gente. 

Estamos para seguir debatiendo nuestro futuro, pero en estas cuatro décadas de democracia hemos avanzado y encontrado cambios profundos  que facilitan el ejercicio de nuestra profesión y el fortalecimiento de las instituciones de la colegiación, así como también cambios en la justicia y en el acceso del judiciable. Hay muchos ejemplos para remarcar en este sentido pero me parece importante destacar algunos como: 

La creación del Consejo de la Magistratura, los distintos Departamentos judiciales facilitando el acceso de los judiciables, la Mediación obligatoria, fueros especiales en distintas materias, la informatización de los expedientes.

Y en nuestra Caja que se encuentra en constante cambio y buscando optimizar los recursos para que lleguen a los afiliados y afiliadas: Se estableció un punto de sustentabilidad que viene mejorando a través de los años, Se creó  un sistema de estamentos que le permite a los y las colegas elegir el aporte que más se ajusta a su realidad profesional, mantuvimos y mejoramos la Jubilación por Edad Avanzada, creamos y solidificamos el Régimen para abogados con discapacidad, se obtuvo el rango constitucional de las Cajas profesionales , Se mejoró en calidad el sistema de salud haciendo que esté siempre al lado de los abogado, sin importar donde ejerzan su profesión.

Pero también entendemos que así como exigimos del poder judicial que se cumpla nuestra ley de honorarios, también consideramos que es necesario que se cubran las vacantes de jueces y auxiliares de la justicia, que exista una política salarial adecuada, que se mejoren los déficit de la infraestructura, y se establezca un presupuesto adecuado.

La justicia, nuestra profesión, el trabajo fuera y dentro de tribunales y nuestro futuro como jubilados depende de que todos trabajemos mancomunadamente y se respeten los derechos adquiridos.

Dicho esto, lo que más satisfacción me da como Presidente de la Caja de la Abogacía es que nuestro crecimiento venga de la mano de la democracia: el diálogo y las acciones conjuntas. Acciones conjuntas entre la Caja con el Colproba, la Caja con la Suprema Corte, con el Consejo de la Magistratura, y fundamentalmente agradecer a los Jóvenes abogado/as   ya que la labor que llevan a cabo es muy importante para que cada nuevo abogado y abogada conozca su sistema previsional, sus obligaciones pero también sus beneficios. 

Acá nos van a encontrar el año que viene defendiendo la colegiación y trabajando para mejorar.