Los acuerdos salariales que el Gobierno cerró con los diferentes gremios y el dato de la inflación anual, que según difundió esta semana el INDEC fue del 24,8%, dejó mal parado al gobierno de María Eugenia Vidal. A causa de la cláusula gatillo, el ejecutivo bonaerense deberá abonar un incremento salarial a los empleados del estado con los sueldos correspondientes al mes de enero y luego se incorporará al básico permanente. Resulta que el gobierno había logrado cerrar un aumento del 18% para los empleados estatales, siempre bajo el compromiso de la actualización automática por la cláusula gatillo.
En este sentido, según publica agencia DIB, el aumento no será igual para todos los sectores. Los docentes, empleados judiciales y profesionales de la salud, que en sus diferentes paritarias cerraron un acuerdo salarial del 21,5% anual, recibirán un 3,3%. En tanto, los empleados de la administración, que en diciembre de 2016 aceptaron un esquema de incrementos con actualización trimestral, el saldo favorable será del 1,5%.
Por su parte, si bien desde el Ejecutivo destacaron en varias oportunidades la efectividad de este método, lo que incluso fue elogiado desde el sindicalismo estatal, la posibilidad de quitar la cláusula iría en línea de la idea del Gobierno nacional de que este tipo de medidas tienden a alentar las expectativas inflacionarias.
Además, desde el Gobierno analizan cuál será el porcentaje de aumento que se ofrecerá a los gremios en las pr´pximaas paritarias. La Provincia pretendía ofrecer aumentos de entre un 10 y un 12% anual, pero el reconocimiento de que el incremento de precios será mayor complicó ese plan.
Desde los gremios, ubican sus propias proyecciones inflacionarias cerca del 20%, por lo que una paritaria "cerrada", sin gatillo, podría resultar una complicación extra si el Gobierno pretende ajustarse al 15% oficial. [El Teclado]