La Subsecretaría de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires repudió las declaraciones del ministro de Justicia de la Nación Mariano Cúneo Libarona respecto de la prisión domiciliaria para genocidas.
El funcionario de Javier Milei se mostró a favor de que los condenados por delitos de lesa humanidad estén en sus casas y afirmó que “esas personas merecen morirse en su casa con una tobillera de la mano de la esposa”. “Parece que no es justicia sino que se torna en venganza” y que “se afecta el criterio de humanidad de las penas, y el criterio de dignidad”.
“Son gravísimas las afirmaciones del ministro Cuneo Libarona que considera como venganza el proceso de Memoria, Verdad y Justicia”, expresó el subsecretario Matías Moreno y agregó que “no sorprende, no es algo nuevo, porque sigue la línea del gobierno nacional, de la vicepresidenta Victoria Villarruel que se dedicó a defender la actuación de los genocidas, y que los visitó en las prisiones en una clara reivindicación del Terrorismo de Estado”.
“Por otro lado señalar, acerca de las cuestiones de salud que plantea Cuneo Libarona, que los penales del Servicio Penitenciario cuentan con toda la capacidad de alojar a personas longevas gracias a su sistema integral de salud, y que sus condiciones son monitoreadas”.
“Transcurrieron 41 años desde la recuperación de la democracia y las condenas a los represores fueron confirmadas por la Corte Suprema de Justicia, basada en un marco normativo internacional y el Pacto de San José de Costa Rica, que establece que los delitos que tipifican hechos constitutivos de graves violaciones a los derechos humanos deben contemplar penas adecuadas a tales delitos”.