Mientras se comienzan a delinear los armados de lo que será la batalla electoral del 2019, se espera que la ley de Paridad comience a aceitar sus engranajes para que los índices del 2017 se modifiquen hasta lograr la total aplicación de la normativa que apunta a lograr una igualdad de género en todos los poderes del estado. Hasta ahora, prodría decirse que el más avanzado es el legislativo, pero ese deberá llevar adelante una dura pelea por correr de sus sillones al patriarcado judicial; y comenzar a dar el ejemplo en el Ejecutivo, donde por ejemplo en Buenos Aires la única figura de poder el María Eugenia Vidal, rodeada de un gabinete integrado solo por hombres.
Un estudio realizado por el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC), explica que porcentaje de concejalas electas por municipio aumentó: en 2017 representaron, en promedio, un 45%, mientras que en 2015 habían sido un 33%. Con la ley de paridad, en ningún municipio la proporción de electas fue inferior al 30% del total, mientras que en 2015 esto sucedió en el 32% de los municipios.
En cuanto a los municipios, por ejemplo Pinamar eligió en 2015 un 14% de concejalas, mientras que en 2017 eligió un 42% con la ley de paridad. Zárate pasó de elegir un 20% de concejalas en 2015 a un 40% en 2017. Por su parte, San Miguel eligió un 16% de mujeres en 2015 y un 41% en 2017. En 2015, Florencio Varela y Lanús eligieron un 25% de concejalas, en 2017 un 50%.
Además, en 67 municipios hay ahora, tras ese sufragio, un 50% o más de mujeres, algo que en 2015 sólo había ocurrido en 15 de los 135 casos. En cuanto a las intendentas bonaerenses, hoy se cuentan 4: Verónica Magario en La Matanza, Erica Revilla en General Arenales, Fernanda Antonijevic en Baradero y Sandra Mayol en San Migueldel Monte.
En rigor, su aplicación total todavía cuenta con obstáculos. Recordemos que en la provincia, una decisión administrativa de la Junta Electoral generó reglas diferenciadas para agrupaciones con procesos competitivos de selección de candidaturas y sin ellos. Si bien en la elección general de 2017 el 83% de las listas en la categoría concejal respetó las exigencias de paridad con alternancia y secuencialidad y el porcentaje de mujeres electas y en los concejos aumentó, el respeto de la paridad en elecciones futuras no está garantizado.
Para asegurar el efecto positivo de la ley de paridad es necesario monitorear, sistematizar y difundir información sobre la participación política y electoral de las mujeres en la PBA, tomando en cuenta experiencias y buenas prácticas internacionales. Es importante producir información sobre lo que ocurre en el nivel municipal, donde hay poca disponibilidad de datos. En los cargos ejecutivos municipales, las mujeres que consiguen llegar a la intendencia son todavía excepcionales, algo que sugiere que la presencia femenina en los concejos es todavía en buena parte producto de las medidas de igualdad (cuotas y paridad) que no rigen para la elección de cargos ejecutivos.
De manera consistente, dos variables institucionales afectan la proporción de mujeres electas en cargos municipales de la PBA: la dispersión del voto (medida como la cantidad de partidos que obtiene una proporción importante de votos) y la cantidad de cargos en juego. Allí donde menos partidos sacan un porcentaje importante de votos, se eligen más concejalas. Cuántos más cargos hay en juego, también resultan electas más mujeres. Por el contrario, cuando hay menos cargos en juego y aumenta la dispersión del voto, desciende la probabilidad de que se elijan mujeres. Esto ocurre porque los primeros lugares de las listas suelen estar ocupados por hombres.
Por otra parte, no se encontró ninguna relación entre la proporción de mujeres electas y características poblacionales, sociodemográficas, presupuestarias ni partidarias de los municipios.
En síntesis, las reglas que reservan lugares en las listas para las mujeres han tenido un efecto positivo sobre su representación en los concejos deliberantes de la provincia. Sin embargo, hasta ahora ese efecto no parece extenderse a las posiciones de autoridad dentro de los mismos concejos, ni a los cargos ejecutivos municipales. En los próximos años será preciso evaluar si la paridad contribuye a promover un mayor acceso de las mujeres a esos lugares o se requieren medidas complementarias para lograr la representación política paritaria de los géneros. [El Teclado]
EL ESTUDIO COMPLETO:
La Ley de Paridad en Los Municipios Bonaerenses - El Teclado by El Teclado [www.elteclado.com.ar]