La triste noticia que hemos recibido por parte del ministerio de salud de la Nación sobre el cese en la vacunación antimeningococcica a niños y niñas de 11 años, causa alarma y conmoción en toda la comunidad.
Nuestro país tiene reportados cerca de 150 casos anuales de meningitis por Meningococo. Las consecuencias de esta enfermedad son conocidas y temidas por nuestra población, alta tasa de mortalidad (50 %) y morbilidad (secuelas neurológicas severas de distinta índole).
Eliminar del calendario la dosis correspondiente a los 11 años, cuya población es portadora más habitual de dicho germen, lo cual permite el contagio y propagación en niños generalmente menores, es una barbaridad. La vacuna tetravalente contra el meningococo se incorporó al calendario nacional en 2015, pero se empezó a aplicar en 2017. Si hay algo de lo cual debemos sentirnos orgullosos como sociedad es de nuestro calendario nacional de vacunas, por lo completo que es.
Nunca en la historia se han sacado vacunas del calendario, ha habido demoras en las compras, tiempos en los cuales nuestro calendario no ha avanzado en la medida que muchos hubiéramos querido, pero que se hayan eliminado vacunas del calendario nunca. Por otro lado, genera mucha tristeza saber que a las mineras, al champán o a los autos de alta gama se les quitan impuestos, mientras se sacan vacunas del calendario nacional.
Joaquín Cara es pediatra, secretario de Extensión de la Facultad de Medicina de la UNLP.