La gobernadora María Eugenia Vidal presentó la rendición de cuentas de sus cuatro años al frente de la provincia de Buenos Aires. "No me voy con el bolsillo pesado; me voy con la conciencia tranquila”, aseguró al dar su diagnóstico a una semana de realizar el traspaso de mando que llevará a Axel Kicillof a la asunción de una nueva gestión que iniciará el 11 de diciembre próximo.
“Dejamos menos deuda de la que recibimos”, aseveró Vidal este martes por la tarde. Esa afirmación, claro es motivo de discordia ya que su antecesor en el cargo, Daniel Scioli, afirma lo contrario. "Los 11 mil millones de dólares de deuda se ven en las cloacas, en las rutas, en los hospitales y en las 2400 obras que empezamos y terminamos", explicó al respecto.
La gobernadora saliente destacó, además, la recuperación del Fondo del Conurbano. Y anticipó que empezará a buscar trabajo a partir de marzo. "No me voy con el bolsillo pesado, pero sí con la conciencia tranquila", puntualizó. A su lado, estaban sentados Daniel Salvador, vicegobernador de la provincia, y Federico Salvai, Jefe de Gabinete bonaerense; entre otros dirigentes.
Hoy presentamos nuestra rendición de cuentas para mostrar todo lo que pudimos hacer juntos en estos 4 años y cómo dejamos la Provincia.
— María Eugenia Vidal (@mariuvidal) December 3, 2019
Los datos van a quedar en la web https://t.co/ljPrSNEeIf para que todos puedan consultarlos. #VidalRindeCuentas pic.twitter.com/vBQE3tw3NI
Vidal aclaró que los números que presentó este martes en Vicente López fueron también exhibidos en reuniones que mantuvo con Kicillof y su equipo. Y, en esa línea, agregó: "Cuando llegamos en 2015 había 179 millones de pesos. El equivalente actualizado por la inflación es de 700 millones de pesos. Nosotros vamos a dejar 25 mil millones de pesos", precisó.
Por otro lado, afirmó que la causa de los aportantes truchos deberá saldarse en la justicia. La gobernadora resaltó que con el dinero que deja quedará garantizado el pago de sueldos, pensiones y jubilaciones.
También, ponderó que durante sus cuatro años de mandato no discriminó a ningún intendente por su color político. "Hicimos obras con los 135 intendentes", arrojó.
Vidal esquivó referirse al concepto de tierra arrasada, que Kicillof utilizó para diagnosticar la herencia que recibe de Cambiemos. "Quiero poner sobre la mesa el tema de la deuda. La deuda registrada del gobierno anterior era de 9.300 millones de dólares. Pero a medida que fueron pasando las semanas, fuimos encontrando facturas y otras partidas a pagar que nos revelaron que había una deuda no registrada, equivalente a 1.800 millones de dólares", dijo.
Y concluyó: "En total, la deuda que encontramos en diciembre de 2015 fue de 11.200 millones de dólares. La deuda que vamos a dejar es de 11 mil millones de dólares".