Con el objetivo de reactivar la economía local, que se encuentra en un estado crítico como consecuencia de la pandemia, el Municipio de Tigre, en conjunto con diversas cámaras de comercio del distrito, diseñó un protocolo de seguridad e higiene para la reapertura administrada de negocios minoristas y actividades profesionales. El mismo fue presentado por la comuna que conduce Julio Zamora ante el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, que ahora deberá evaluarlo y definir su aprobación.
El protocolo detalla las medidas sanitarias que deberán cumplirse para la reactivación de rubros de comercio minorista como locales de indumentaria deportiva, artículos para el hogar, blanquerías, electrodomésticos, inmobiliarias, mueblerías, relojerías, computación, peluquerías y mercerías. Además, incluye actividades de profesiones liberales como abogados, psicólogos, escribanos, diseñadores, ingenieros y arquitectos, entre otras, con la excepción de las relacionadas con la medicina y auxiliares.
La propuesta del gobierno local, enmarcada en la Decisión Administrativa N°524/2020 del Decreto Provincial 262/20, propone horarios específicos de atención al público tanto para los comerciantes como para los profesionales. También numerosas medidas de higiene para los locales y de prevención (tapabocas, distanciamiento, etc.) para los empleados y los clientes.
El protocolo establece además que el Municipio se encuentra con la capacidad cualitativa y cuantitativa para garantizar las funciones laborales durante la pandemia, a través de su cuerpo de inspectores de comercio, industria y ambientales. El personal tendrá la facultad de sancionar o clausurar aquellos comercios que no cumplen con dicha formalidad.
Participaron de la elaboración del documento la Cámara Comercial e Industrial de Tigre; la Cámara de Comercio e Industria de General Pacheco; Comercio, Industria y Profesionales de Don Torcuato (CCIP), de El Talar (CET); Comercio e Industria de Rincón de Milberg (CACIR); Comercio Troncos del Talar (CTT); de Comercio de Las Tunas; Comerciantes, Empresarios, Profesionales e Industriales de Benavídez (CCEPIB) y representantes del Puerto de Frutos. [El Teclado]