Santiago Cafiero aclaró que "no se trata de superpoderes; en momentos extraordinarios, necesitamos un Estado activo y flexible"
En medio de las críticas de la oposición, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, se refirió a los artículos del DNU 457/2020 de ampliación del Presupuesto, que suspende por este año la limitación que tiene el Jefe de Gabinete para reformular las partidas presupuestarias.
Vía redes, el funcionario nacional detalló:
El 10 de diciembre asumimos el Gobierno en emergencia económica y social. No lo decimos nosotros; tres de cuatro años de caída en la actividad, más de un 300% de inflación acumulada, endeudamiento más acelerado de la historia y más de un tercio de la población en la pobreza.
También lo dijo el Congreso, que votó la Ley de Emergencia Alimentaria y la de Solidaridad Social y Reactivación Productiva. Hasta el Gobierno anterior lo reconoció, al decretar default de la deuda pública y enviar un proyecto para restaurar su sostenibilidad (Mensaje 174/2019).
No se trata de “superpoderes”. En momentos extraordinarios, necesitamos un Estado activo y flexible para poder proteger a todas y todos los que habitan este territorio.
— Santiago Cafiero (@SantiCafiero) May 13, 2020
El gobierno de Macri no sólo nos dejó una crisis de deuda, alta inflación y niveles crecientes de pobreza: nos dejó sin presupuesto.
El Presupuesto 2020 enviado por el gobierno anterior no reflejaba la situación económica y social. Suponían que la economía iba a crecer con un ajuste fiscal enorme para así afrontar todos los pagos de la deuda que ellos mismos habían reconocido insostenibles y habían reperfilado.
Para que el país pudiera seguir funcionando tuvimos que prorrogar el Presupuesto del año 2019. En un contexto de alta inflación, esto suponía de manera inevitable una ampliación presupuestaria. De lo contrario, el gobierno no hubiera podido funcionar más allá de la mitad del 2020.
Todo esto antes del COVID.
Para contener los efectos de la pandemia el gobierno dispuso el aislamiento social, preventivo y obligatorio. Y las y los argentinos se quedaron en su casa. Para cuidarse y para cuidar a todes.
Desde una mirada integral, tomamos medidas para proteger la salud, fortaleciendo políticas de cuidado y reforzando el sistema sanitario. Y para proteger la economía y el ingreso de las familias.
Ingreso Familiar de Emergencia, préstamos a tasa cero para monotributistas y autónomos, la postergación o reducción de las cargas patronales y el salario complementario para pagar en forma directa los salarios de las y los trabajadores del sector privado.
También se pagaron bonos especiales a sectores más vulnerables: AUH, AUE, jubilados de la mínima, personas con discapacidad. En reconocimiento a quienes enfrentan la crisis sanitaria en primera fila, trabajadores de salud, seguridad y FF.AA, se diseñaron pagos extraordinarios.
En el entendimiento de que el impacto económico adverso también afectaba a las Provincias, elaboramos un plan de asistencia de $120.000 millones. Son los y las gobernadoras, los que están más cerca de las necesidades de la gente, queremos asistirlos y cooperar con ellos.
El listado de políticas continúa pero este resumen es suficiente para enteder el extraordinario esfuerzo presupuestario realizado en los últimos 60 días.
El costo fiscal del paquete de protección económica y social asciende, hasta el momento, a unos $380.000 millones, equivalente a casi un 1.5% del PIB. Para poder continuar con las políticas de asistencia era necesario ampliar el Presupuesto…y eso hicimos.
En el mismo DNU se me otorgaron facultades para transferir dinero de una partida a otra únicamente cuando estas modificaciones estén relacionadas con la emergencia sanitaria y para destinar los fondos reservados de la AFI a políticas nutricionales, educativas y de salud.
No se trata de “superpoderes”. En momentos extraordinarios, necesitamos un Estado activo y flexible para poder proteger a todas y todos los que habitan este territorio.