Zaira Mores está feliz. Con esa palabra simple pero contundente su madre Cristina Verón definió el estado de ánimo de la pequeña, luego de atravesar días de amargura y bronca, cuando se negaron a ficharla para que compitiera en el Campeonato Evita de Berazategui por ser una nena.

En este contexto, la noticia de la admisión de Zaira en la liga infantil de Berazategui llegó después de una batalla de varias semanas que encabezó su mamá con el acompañamiento de la institución donde juega y un grupo de amigos y allegados a la familia. 

De este modo, Zaira, de seis años, podrá cumplir su sueño de disputar un partido oficial con sus compañeros de siempre, los que integran la categoría 2012 de Barrio Nuevo y con quienes comparte entrenamientos desde 2018.
 

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“La noticia de la admisión de Zaira llegó hace una semana y la recibimos con mucha alegría y ansiedad. Ella está feliz”, detalló en dialogo con [El Teclado] su mamá, Cristina Verón.

Del mismo modo, la mujer resaltó la relevancia que la novedad supone no sólo para su hija, sino también para otras niñas que puedan estar en su misma situación. “Es bueno para otras chicas, porque Zaira no es la única que quiere jugar al fútbol. Y hay muchas otras nenas que seguro quedaron en el camino porque no las admitieron”, reflexionó, mientras espera ansiosa el debut de su hija que, hasta el momento, se pospuso por cuestiones climáticas.

 #Especiales l Cancha inclinada: Zaira tiene 6 años y quiere seguir jugando al fútbol, pero la liga infantil de #Berazategui no acepta nenas. Lee la historia completa.

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— El Teclado (@ElTecladoOK) April 12, 2019

Pero la buena nueva no es sólo para Zaira ya que, tras debatir su caso, la Liga habilitó la posibilidad de presentar equipos mixtos en tres categorías: 2010, 2011 y 2012.

[LA HISTORIA]

La historia de Zaira, que es delantera y goleadora en la Sociedad de Fomento “Fútbol Infantil Barrio Nuevo El Pato”, revolucionó a toda la comunidad de Berazategui luego de que rechazaran su inscripción en la Liga infantil de ese municipio sólo por su condición de género. “No podemos anotarla porque es una nena”, le habían dicho entonces a su mamá y, con esa frase, habían dejado a Zaira fuera de las canchas de todas las maneras posibles. Es que el problema era doble: no aceptaban niñas para formar equipos mixtos, pero tampoco desarrollaban un torneo femenino, lo que dejaba a las mujeres sin posibilidades de jugar al fútbol por completo.

Sin embargo, el rechazo no detuvo a Zaira ni a su madre que, tras semanas de lucha compartida con los compañeros de la pequeña y familias amigas, lograron revertir la injusta situación. “Cuando recibimos la buena noticia, estábamos reunidos en casa con amigos. Pero Zaira no pudo reaccionar”, contó Verón. Y conifirmó que, recién al día siguiente, mientras firmaba su inscripción en el torneo, la pequeña expresó su felicidad. “Por fin voy a poder jugar”, le dijo a su madre con una sonrisa, sin saber que, con su reclamo, abrió la puerta para que muchas otras niñas puedan cumplir su sueño. [El Teclado]